Pensamiento vago

Hoy el reloj sonó más temprano de lo acostumbrado, sonó tantas veces que tocó todas sus melodías, así que me desperté y ví que era una hora con veinte minutos más temprano, realizé mis actividades acostumbradas, oré, me cepillé los dientes, me bañé, me vestí y desayuné, así que emprendí mi salida hacia la oficina, el autobús venía vacío, era de esperarse, obviamente era mas temprano de lo que normalmente lo abordo, las calles casi vacías, en la oficina había un silencio que se podía palpar, si, allí estaba sentado en mi escritorio, todo en silencio; si!! alli estaba también la oficina del gerente, donde siempre he querido husmear, y ¿porque no? avancé lentamente, mi cuerpo temblaba, agitado mi corazón, mi respiración era mas rápida de lo normal, pero llegué, comenzé a husmear, y sobre su escritorio una hoja, con la escritura hacia abajo, la tomé y leí lo que decía: Sr. Morales, junta a las 8:00 a.m., de inmediato volteé a mi reloj y ví que faltaba un minuto para las 8:00 de la mañana, asi que dejé la hoja en su lugar y salí corriendo hacia mi escritorio; allí estaba el gerente de la empresa, allí estaba, sentado en mi lugar, llegué agitado, el gerente me dijo: Lo felicito Sr. Morales, siempre puntual, como siempre; no podía creer que no se haya dado cuenta de donde venía, pero me vi bien, llegando "puntual", el Gerente me dijo: Bien Sr. Morales, comenzemos. Por un momento tuve los nervios de punta, no sabía que me tenía la empresa, pero me dispuse a escuchar al gerente.
Bien Sr. Morales, la empresa ha visto su alto desempeño y hemos decidido que usted debe ocupar el puesto de Coordinador de Proyectos, - no lo podía creer - mientras tanto ya nos ocupamos de acondicionarle su nueva oficina, lo felicito, y desde hoy comienza a realizar sus actividades como Coordinador, Felicidades, Sr. Morales ya despiértese!! así que desperté con una agitación tremenda y el reloj sonó, sonó tantas veces que tocó todas sus melodías, así que me desperté y ví que era ya la hora de levantarse, realizé mis actividades acostumbradas, oré, me cepillé los dientes, me bañé, me vestí y desayuné, así que emprendí mi salida hacia la oficina, el autobús como siempre, lleno, las calles llenas, bajaba las escaleras con rumbo a mi oficina, los compañeros no dejaban de verme y algunos murmuraban, otros me palmeaban la espalda, algunos más me gritaban de lejos, Felicidades Morales, y oh sorpresa!! al acercarme a la Oficina del Coordinador de Proyectos ví que estaba remodelada, en la entrada una placa: Ing. Eduardo Morales (con negrita) Coordinador de Proyectos (con letras más pequeñas pero visibles), no podía creer lo que estaba pasando, se acercó el Gerente de la empresa por detrás mio y me palmeo la espalda y me dijo: Felicidades Sr. Morales, pero ya despiértese!! así que lo hize con una agitación tremenda y el reloj sonó, sonó tantas veces que tocó todas sus melodías . . .