Hace algunos días mi esposa escribió sobre el Salmo 139, que habla cómo es que Dios forma a detalle nuestros cuerpos, cómo es que con sus dedos nos forma, etc, y en su reflexión hablaba sobre la bendición que hemos recibido de nuestro Dios, nuestra bebé, y en verdad es increíble al estar siguiendo su desarrollo, cómo se forma una vida dentro de otra, en lo personal se me hace bastante increíble, y de esta manera puedo corroborar la grandeza de nuestro Dios, me gustaría seguir a detalle cómo se forma un bebé, pero eso solo lo estoy pensando porque la verdad es que nadie puede hacerlo, solamente Dios sabe cómo hacer que se desarrolle cada célula, cada miembro de su cuerpecito, cada músculo, su vello, etc, y eso me llevó a pensar en lo que estamos estudiando sobre el Libro de Génesis, de cómo el hombre fue hecho, del cuidado y la atención especial que Dios dedicó al Hombre, porque a toda la creación dijo: Haya, produzca, sea, pero cuando llegó el día de hacer al hombre dijo: “Hagamos al hombre. . .” “…a imagen de Dios lo creó…”
Cada uno de nosotros fuimos seleccionados según Dios, a cada uno de nosotros Dios nos puso atención especial, cuidados, y eso es hermoso, porque independientemente de ello, Dios puso ya las virtudes y dones que necesitaríamos en nuestra vida, de los cuales yo estoy muy agradecido por todo lo que me dio, pero a la vez avergonzado por no desarrollarlos como Él quisiera, y eso me debe llevar a la gratitud, pero a la vez a mejorar el desarrollo de mis dones y virtudes, eso es en cuanto a lo particular, pero en cuanto a lo que pienso del cuerpo del Señor, a nosotros como Iglesia:
Cuando cada uno en particular nace en Cristo, no nace sabiendo todo, es como un bebé, primero Dios forma en nosotros todas las características que Él quiere que tengamos, va "desarrollando nuestros músculos", va formando en nosotros cada miembro de nuestro "cuerpesito", y va poniendo virtudes en nosotros, muchos piensan que en seguida tienen que trabajar para el Señor, quieren "correr", pero recordemos lo que el Apostol Pablo hizo cuando el Señor le llamó, él no fue imediatamente a los Apóstoles que estaban en Jerusalén, ni tampoco fué a los gentiles, dice en Gálatas 1:17,18; sino que fué y se preparó, Dios no hace que nazcan de 20 o 30 años, no!! sino que primero forma, llama, capacita, y pone dones y virtudes para usarlos a su debido tiempo, y recordemos que un bebé no puede ser independiente, necesita de cuidados y atenciones, y en el hijo de Dios "recien nacido" es igual, no somos independientes, somos dependientes, primeramente de Dios, y también de nuestros hermanos, porque como un cuerpo somos UNO, no lo olvidemos, aunque desafortunadamente hay personas que no piensan eso, pero no quiero hablar de ellas, proque tal vez esas personas, ni siquiera han hecho una desicion por Cristo ni mucho menos un compromiso, pero los que somos de Cristo amémonos unos a otros así como Cristo amó a la Iglesia y se entregó así mismo por ella; yo mientras tanto, estoy disfrutando cada momento y detalle de mi bebé, y aprendiendo y aplicándolo a la vida del hijo de Dios.
Bendiciones